Con motivo del día de San Valentín, decidí hacer unas cajitas para que los enamorados pudieran regalar a sus parejas (y aunque mi público fue mayormente masculino, también tuve alguna chica).
En las cajitas incluí muffins de chocolates, para endulzar un día cómo ese, unas cartas de amor, y más detalles románticos (dependiendo de lo que me pedían).
Pues lo mejor son las historias:
- Un chico que no le ha regalado nada a su chica en todo el día, pero por la noche, cuando llegan del cine, y ella ya no espera nada, descubre el paquetito encima de su cama
- Una novia que se marcha a trabajar y le deja la cajita a su chico con una nota, para que tenga un feliz desayuno
Lo mejor de hacer detalles cómo éstos siempre son las historias que hay detrás. Y cuando veo las fotos en las redes sociales, y me llaman para decirme que no me deje de dedicar a ésto, que otras chicas deberían sentir lo mismo que sintieron ellas, se que no me he equivocado, que mi destino
era ser un Hada Madrina.
Buenos días,
ResponderEliminarTienes unas ideas fantásticas, qué bonito detalle para San Valentín!
Que tu creatividad nunca pare, porque es maravillosa!
Besitos guapa!
Gracias Lidia,
Eliminarla verdad es que cuando te enteras de las historia que hay detrás de tu trabajo, sabes que esa es la mejor recompensa.
Un besito